Diferencia centre CES y las protectoras

En nuestro caso, en muchos momentos del año, gracias a la grandísima labor que realizan los voluntarios, no tenemos gatitos para dar ni ningún caso de abandono. No obstante, hay muchísimas asociaciones y protectoras que sí cuentan con gatitos a su cuidado que buscan una nueva oportunidad para regalar todo el cariño y amor que solo los que hemos conocido la compañía de estos peluditos sabemos.

Para que conozcáis un poquito más la diferencia entre CES y las protectoras, hoy os vamos a contar en qué consiste nuestro trabajo y por qué es tan importante que no dejéis de lado a las protectoras si queréis adoptar. En ocasiones nos contacta gente por redes sociales preguntando sobre algún gatito para adoptar.

CES: el método de coger, esterilizar y soltar. 

Como bien indica su nombre, CES hace referencia a coger, esterilizar y soltar. ¿Qué significa esto? Que las asociaciones CES nos dedicamos principalmente a coger a los gatitos de las calles, esterilizarlos para evitar que las hembras críen (debilitándose y arriesgando su propia vida a causa de varios embarazos) y los volvemos a soltar. 

Por ello, no solemos tener casos de abandonos o gatitos para adopción. Sin embargo, como ya os hemos dicho antes, las protectoras SÍ tienen gatitos pequeños y adultos para dar en adopción. 

El caso de las protectoras, asociaciones y organizaciones. 

¿Te imaginas cómo debe ser estar atrapado en un lugar en el que apenas te puedes mover? ¿En el que careces de algunas de las condiciones básicas? Y ello sabiendo que todo podría cambiar si alguien quisiera darte la oportunidad de ser su compañero.

Cuando nos preguntan sobre acogidas y contamos que no tenemos y nos dedicamos a CES, a veces la gente no responde muy bien o se desilusionan. Pero como decimos, hay muchísimas protectoras, tanto de gestión pública como privada, con muchos animales esperando que una familia les dé una oportunidad y les saque de esa situación.

España es uno de los principales países con mayor tasa de abandono animal. ¿Y qué significa esto? que muchos animales son olvidados en las calles o cedidos a las protectoras por sus anteriores familias. Muchos de ellos no verán nunca un hogar; pasarán su vida hacinados con otros, sin espacio suficiente y entre rejas: esperando que llegue un voluntario para poder jugar durante un corto tiempo y a veces incluso ni eso.

La peor parte se la llevan los más mayores; los que incluso, únicamente tienen un año. En estos casos, la gente no suele fijarse en ellos; aunque son los que menos problemas suelen dar porque ya han desarrollado su carácter. 

Sabemos que es mucho trabajo y que las protectoras hacen lo que pueden. Debemos pensar que, independientemente de lo que uno pueda opinar sobre la gestión interna de muchos de estos centros, hablamos de animales que necesitan salir de ahí cuanto antes. No eches la vista a un lado, salva una vida; ¡no compres, adopta!